Al menos dos personas han muerto, once han resultado heridas y varios edificios gubernamentales han sido incendiados hoy durante una protesta para pedir la liberación del comandante de una milicia en la provincia de Faryab, en el norte de Afganistán, donde las autoridades han desplegado al Ejército.
Miles de manifestantes salieron por tercer día consecutivo a las calles de la capital provincial, Maymana, para pedir la liberación de Nizamuddin Qaisari, un alto mando policial detenido recientemente y vinculado con el vicepresidente afgano, Abdul Rashid Dostum, quien está exiliado en Turquía desde hace un año.
Qaisari fue detenido junto a 25 de sus hombres después de que protagonizase una disputa violenta con las fuerzas de seguridad durante una reunión oficial y fue trasladado a Kabul para ser sometido a una investigación, informó en un comunicado el Cuerpo 209 Shaheen del Ejército, a cargo del norte del país.
"No ha sido una protesta pacífica y la mayoría de los manifestantes eran violentos y estaban armados, cuando entraron a la ciudad comenzaron a protagonizar actos violentos como disparos al aire y saqueos de tiendas", detalló el portavoz del cuerpo, Hanif Rezaee.
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La manifestación se tornó violenta después de que el grupo tratase de entrar en una oficina de la principal agencia de inteligencia afgana, a lo que las fuerzas de seguridad respondieron con disparos al aire.
Según Rezaee, los manifestantes saquearon la Casa del Gobernador provincial y luego prendieron fuego al edificio.
"El Ejército está desplegado en la ciudad y ahora la situación está parcialmente bajo control", aseveró la fuente.
Confirman los fallecidos
El jefe del Consejo Provincial de Faryab, Tahir Rahmani, quien hasta hoy había estado tratando de apaciguar a los manifestantes, confirmó que al menos dos personas murieron y otras once resultaron heridas durante la protesta.
"La situación no está bien en la ciudad, más de 20.000 personas han participado en la protesta. Si el Gobierno central no libera a Qaisari los manifestantes pueden quemar más edificios gubernamentales", advirtió.
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